Así fue como Camilo pidió la mano de Evaluna a Ricardo Montaner

Camilo y Evaluna Montaner son una de las parejas más reconocidas en el medio artístico, y actualmente los cantantes viven una nueva etapa con la llegada de su primogénita, Índigo.

Los dos artistas llevan una excelente relación con sus familias políticas, ya que ella ha demostrado ser muy cercana a sus suegros, Eugenio Echeverry y Lía Correa, en tanto que Camilo siempre ha demostrado su admiración por Ricardo Montaner, quien lo considera un hijo más.

La pareja lleva más de cinco años juntos y a lo largo de este tiempo los fanáticos de los artistas han sido testigos del desarrollo de su relación desde el noviazgo, matrimonio y la llegada de su pequeña, sin embargo aún hay detalles por esclarecer, como por ejemplo, cuando el colombiano pidió la mano de Evaluna a su suegro.

El intérprete de ‘Ropa cara’ reveló qué pasó aquel día en que decidió pararse frente a Montaner y expresarle las intenciones que tenía con su hija, pero lo que ocurrió era algo que no tenía previsto el colombiano.

En entrevista a Cadena Dial, Camilo contó lo que sucedió cuando fue a la casa de la familia Montaner en Miami, donde a pesar de que tenía todo planeado, el cómo diría las cosas, la realidad es que los nervios lo invadieron e incluso recuerda que el venezolano no lo dejó ni hablar.

Camilo aprovechó un momento que tuvo a sola a Montaner para pedir la mano de Evaluna, pero la respuesta del interprete de ‘Me Va a extrañar’ fue poco previsible para el colombiano.

“Nos sentamos y él me miraba y yo estaba verde, y le dije: ‘Montaner tengo que hablar contigo’.  Esta frase es horrible, esta frase da miedo. Él me dijo: ‘Mira, chico, te voy a decir una cosa, cuando yo fui a pedir la mano de Marlene a su papá y a su hermano…’, empezó a hablarme y yo pensé: ‘Este tipo cómo sabe que le voy a pedir esto’. Yo no dije ni una sola palabra, él lo dijo todo y al final me expresó que yo no tenía que demostrarle nada”.

Esta fue la confesión de Camilo sobre aquel momento con el que hoy en día suele bromear, pues asegura que si en lugar de ir a pedir la mano de su hija, iba por una “plata” prestada, y Montaner le respondía de la misma manera, no habría forma de no casarse con Evaluna.

AG