Razones evitar tomar bebidas rehidratantes si no son necesarias

La bebidas rehidratantes al igual que los sueros orales, suelen estar indicados para deportistas o personas que deban rehidratarse tras alguna enfermedad como la diarrea, sin embargo hay quienes las consumen solo por gusto.

Ya sea por su sabor o porque en efecto, se sienten hidratados, el consumo de estas bebidas no es recomendable para las personas que no lo requieran pues puede traer problemas a la salud. Los ingredientes de estos productos son: azúcares, minerales como potasio, magnesio y sal sirven mantener el equilibrio hidroeléctrico en sangre.

Los sueros pueden ser consumidos por mayores de seis años que presenten problemas de salud como diarrea y vómitos causados por infecciones intestinales, por lo que su uso no está contraindicado salvo para aquellos que las toman por placer.

Algo similar sucede con las bebidas deportivas, pues los especialistas señalan que éstas son hechas exclusivamente para quienes realizan ejercicio extremo por más de una hora. El alto contenido en sodio favorece la retención de líquido en el cuerpo para mantener una buena hidratación y no haya necesidad de acudir al baño durante una competencia.

Por estas razones no se deben consumir bebidas rehidratante con frecuencia

Una de las principales contraindicación por tomar este tipo de bebidas si se ingieren como agua de tiempo es por su alto contenido en azucares y sodio.

En caso de tomar bebidas rehidratantes solo por gusto, trae inevitable aumento de peso por la cantidad de azúcar. Altera el metabolismo sobre el proceso de absorber y liberas glucosa, lo que podría derivar en prediabetes.

Al aumentar la glucosa en sangre también favorece que los triglicéridos se eleven, y aunque su presencia en la sangre es clave, pero en exceso trae problemas cardiovasculares.

Consumir bebidas rehidratantes sin necesitarles puede generar Hipernatremia, que es una mayor concentración de sodio en la sangre y que deriva en incremento de la presión arterial.

Uno de los órganos más afectados es el riñón, dado que el exceso de minerales provocan que esta zona del organismo trabaje exhaustivamente, por lo cual provocaría daños, generando sedimentos, los cuales se conocen comúnmente como ‘piedritas’.

AG