La especia con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que rejuvenece la piel al instante
Las propiedades de este ingrediente natural hará que luzcas una piel de porcelana.
Después de los 35 años, todo rostro comienza a experimentar un cambio significativo, causado especialmente por el déficit de colágeno. De ahí, se exhiben con mayor frecuencia las arrugas, manchas y líneas de expresión, generando una cara longeva y carente de vitalidad. Afortunadamente existe un remedio casero infalible, elaborado con una especia, que nos permitirá llevar piel de porcelana.
¿Cuál es la especia que ayuda a rejuvenecer el rostro?
Estamos hablando de una especia que cualquiera tiene en su cocina: el clavo de olor. Con él prepararemos un potente remedio natural con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que pueden ayudar a rejuvenecer y combatir el envejecimiento de la piel.
El clavo de olor es una buena opción para eliminar arrugas del rostro, ya que posee propiedades antioxidantes ayudan a combatir los radicales libres. Además, sus propiedades antiinflamatorias pueden reducir la inflamación de la piel, mientras que también se destaca su poder antiséptico que ayuda a combatir las bacterias y prevenir infecciones de la capa superior de la piel, como el acné.
Como si fuera poco, el clavo de olor es un ingrediente natural que estimula la circulación, mejorando la oxigenación de la piel y promoviendo la eliminación de células muertas, mientras ayuda a la regeneración celular, dándonos como resultado un rostro rejuvenecido.
¿Cómo hacer un remedio casero para la piel con clavo de olor?
Para reducir las arrugas y líneas de expresión, te recomendamos elaborar una mascarilla con clavo de olor. Para dicho remedio casero, el primer paso será hervir una taza de agua y después agregar una cucharada de la mencionada especia. Revolver bien y añadir una cucharada de anís estrella. Después, retirar del fuego y dejar reposar por 10 minutos.
El siguiente paso consistirá en utilizar un colador para verter el poderoso remedio casero en una botella. Dejar enfriar y aplicar en el rostro limpio con ayuda de un algodón, haciendo masajes suaves y circulares. La mascarilla de clavo de olor debe actuar durante toda la noche. A la mañana siguiente, enjuagar con agua tibia. Repetir el tratamiento 3 veces por semana.