Psicología

Conoce el profundo significado de lavarse los pies descalzos bajo la lluvia, según expertos en espiritualidad

Esta práctica puede transformarse en un cable a tierra para superar momentos complejos de la vida.
miércoles, 20 de noviembre de 2024 · 15:00

El estrés, problemas familiares, económicos, peleas, tristezas o duelos, genera que nuestro cuerpo se cargue de energías negativas que, con si no se sanan, se acumulan en el aura. Ante esto, y para evitar que esas impurezas hagan todavía más daño, es necesario realizar una limpieza espiritual para aliviarse y destrabarse. 

Cuanto te sientas pesado, pon en práctica este método. Fuente: iStock.

Ante esto existen diferentes maneras de hacerlo, pero en este caso te contaremos cómo limpiar tu cuerpo lavando tus pies descalzos bajo la lluvia para que las gotas purifiquen no solo la piel, sino también el aura. Esta técnica es una de las más simples y efectivas para quitarte la pesadez que genera esa carga de problemas. 

¿Cómo realizar esta limpieza?

  • Sal descalzo y permite que el agua te toque directamente el agua de lluvia.
  • Mientras eso ocurre, visualiza cómo va quitando cualquier energía negativa o impureza de tu cuerpo.
  • Una vez que sientas que la limpieza ha terminado, agradece por su purificación y deja que el agua se seque sobre ti.

Otra forma es sumergirse en el mar y permitir que el agua salada purifique tu energía. Si tienes la oportunidad, intenta bañarte en siete olas diferentes, visualizando cómo cada una arrastra consigo cualquier carga negativa que puedas estar llevando. El agua de mar es famosa por su poder de purificación, y sumergirte en ella puede ayudarte a liberar toda la negatividad acumulada.

¿Cómo saber si necesitas una limpieza espiritual?

  • Si sientes un agotamiento constante puede que estés cargando con energías negativas.
  • El insomnio o las pesadillas frecuentes son una señal de que tu energía está desequilibrada.
  • Si te cuesta mantener la atención en tus actividades, tu energía esté bloqueada.
  • Pasar de la tristeza a la ira sin motivo aparente tiene que ver con impurezas espirituales acumuladas.

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