Religión
Semana Santa: estos son los pecados que te impiden comulgar en misa
Entérate de las acciones que trasgreden las leyes de la iglesia y que impiden recibir el sacramento de la Eucaristía.El sacramento central de la tradición cristiana es la Eucaristía, también denominada como Santa Comunión o Misa en la religión católica. Se trata de la conmemoración de la última cena de Jesucristo junto a sus discípulos antes de ser crucificado.
Fue durante cena que Jesús instituyó el sacramento luego de compartir pan y vino con sus discípulos pidiéndoles que hagan esto en su memoria, de modo que en la práctica cristiana, la Eucaristía es el acto en el que se consagran estos alimentos representando el cuerpo y la sangre de cristo.
Los devotos realizan el sacramento como una manera de entrar en comunión con Dios y con el resto de fieles, pues la creencia es que obtienen la gracia divina y su fe se ve fortalecida, lo que estrecha la unión entre ellos y la divinidad.
La Iglesia establece que los fieles que quieran comulgar deben ser conscientes que recibirán el cuerpo de cristo, además deben estar en gracia con dios, de tal manera que necesitan estar libre de pecado ya que de lo contrario se comete una severa falta, el sacrilegio.
Estos son los pecados que te impiden comulgar en misa
El cristianismo define al pecado como cualquier acto, deseo o pensamiento que está en contra de la voluntad de Dios, tal como se encuentra escrito en la Biblia, en pocas palabras, es la acción del individuo que lo separa de la gracia del creador.
Existen varias maneras de cometer un pecado, por ejemplo, simplemente desear el mal, tener malos pensamientos así como omitir las buenas acciones que un individuo puede realizar. Según la teología católica, hay dos tipos principales de pecados: veniales y mortales.
El primero de ellos es una transgresión moral que no necesariamente conlleva a la ruptura de la relación con Dios ya que no es un comportamiento que signifique estar en completo rechazo al creador, de forma que el alma del individuo no será condenada eternamente.
Por el contrario, los pecados mortales son un quebranto a las leyes de Dios, suficientes para romper el lazo con el ser supremo, pues son faltas graves que conllevan acciones premeditadas por parte del sujeto y atentan contra los mandamientos de Dios. En ese sentido, los también llamados pecados capitales son los siguientes: soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza, los cuales fueron establecidos por la iglesia católica en el siglo VI.
Para el individuo que quiera comulgar y se encuentre en pecado mortal debe antes pasar por el sacramento de la Confesión, en el cual los files acuden a un sacerdote a quien le deberán admitir sus pecados en busca del perdón de Dios, pues solo mediante esta vía es posible redimirse.
AG