Peajes 2025
Pésima noticia para los colombianos: el aumento en los peajes será más duro de lo que creían
La decisión busca simplificar el ajuste y estabilizar las tarifas. Conozca el impacto de esta medida para los conductores y el contexto económico que la motiva.En un cambio de estrategia frente a los incrementos de los peajes en Colombia, el Gobierno Nacional anunció que, a partir de enero de 2025, las tarifas se ajustarán en una sola etapa. Esta medida, presentada por el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, durante el Congreso Anual de la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI), contradice la propuesta inicial de la ministra de Transporte, María Constanza García, que sugería un aumento escalonado en dos fases.
Una medida para simplificar el proceso
El ajuste, que estará basado en un incremento del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 2023 y el cierre inflacionario estimado en 5% para este año, busca evitar complicaciones para los usuarios de las carreteras nacionales. Según Bonilla, "la inflación en Colombia ha bajado y está en proceso de control. Esto significa que, si venimos ajustando esto, es el momento de normalizar los precios de los peajes. La expectativa es que no sea en dos situaciones, sino en una sola". En este contexto, el Gobierno plantea que una única subida permitirá mayor claridad y previsibilidad para los ciudadanos, evitando confusiones o insatisfacción derivadas de incrementos fragmentados.
Por su parte, la ministra García había argumentado previamente que el ajuste dividido podría mitigar el impacto financiero para los usuarios y compensar el déficit fiscal generado por el congelamiento de tarifas en 2023, que supera los 400.000 millones de pesos. Sin embargo, esta posición no prevaleció ante la necesidad de simplificar y estabilizar las tarifas.
¿Qué significa esto para los conductores?
El incremento único podría representar aumentos significativos para los conductores. Para vehículos particulares, las tarifas podrían superar los 30.000 pesos, mientras que el transporte de carga también experimentará costos adicionales. Este ajuste es clave no sólo para cumplir con los contratos de concesión vial, sino también para aportar al control fiscal del país.
El anuncio llega en un momento en el que el Gobierno trabaja en estabilizar la economía tras un año de medidas como el congelamiento de los peajes. Según Bonilla, el objetivo es ir normalizando ciertos tributos, incluyendo este, para mejorar las finanzas del Estado.
Un panorama económico más amplio
El ajuste en los peajes también refleja las prioridades del Gobierno en términos presupuestarios. Bonilla señaló que programas sociales como alimentación y gratuidad educativa son las "líneas rojas" que no se verán afectadas por recortes, mientras otras áreas, como el Icetex, aún están en debate.
Este enfoque fiscal pone en evidencia los retos de equilibrar las necesidades sociales y económicas en un escenario de recuperación económica. A medida que se acerque enero, los conductores y transportistas deberán prepararse para el impacto de esta decisión.